¿Han muerto los SMS?

Fue un 3 de diciembre de 1992 cuando el primer SMS de la historia fue enviado. Un escueto «Feliz Navidad»  servía para dar por bueno un sistema ideado en una comida informal allá por 1984. Mucho hemos cambiado desde ese primer mensaje, ya que en un principio no se permitía ni la comunicación con otros usuarios, solo los enviaban las operadoras a sus clientes, ni entre clientes de compañías diferentes. El año 2000 supuso el boom del SMS, pero ahora están de capa caída. ¿Cuánto hace que no envías uno?

Los SMS en el año 2021

Ahora es muy extraño que alguien mande un SMS a otro usuario, ya que la opción preferida son las apps de mensajería, ya sea por texto o mensaje de audio. WhatsApp, nacida en 2009, dio la puntilla definitiva a un sistema que iba funcionando bastante bien. Parte del poco éxito que tienen ahora los SMS como sistema de comunicación es el precio. Muchas operadoras siguen cobrando el envío de estos mensajes a 15 céntimos. Además, solo permiten texto y no otro tipo de contenidos. Si todos los mensajes de WhatsApp que mandamos a diario los tradujésemos a dinero en forma de SMS, no habría presupuesto que pudiera aguantarlo.

Las apps de mensajería cuentan con más ventajas: son gratis, dinámicas, permiten enviar de todo y son personalizables al máximo. El SMS es cosa del pasado y los adolescentes que comienzan ahora con el uso de dispositivos móviles no han oído hablar de él jamás. Es más, no terminan de entender su funcionamiento. Cuando se les comenta que tenían hasta un propio lenguaje, las sorpresa es mayor.

Pero lejos de desaparecer, siguen muy vivos. Vale, ya apenas los usamos para comunicarnos entre nosotros o enviar aquellas felicitaciones navideñas tan ingeniosas de hace 15 años. Sin embargo, no podemos prescindir de ellos para muchas cosas. Vamos con unos ejemplos:

• Son imprescindibles para la operativa de finanzas. Seguro que no paras de recibes un SMS del banco cuando quieres confirmar transferencias.
• La app de Cl@ve PIN también necesita de los SMS para funcionar.
• Las promociones de tus comercios favoritos llegan por este sistema.
• Algunas CC.AA utilizan el SMS como sistema de comunicación con los ciudadanos. Si en tu comunidad se necesita sangre, los donantes son avisados por un mensaje de texto.
• Son usados como firma de algunos contratos electrónicos, como los de un préstamo bancario o el alta en una compañía de servicios.

Por todas estas razones, los SMS no van a desaparecer de nuestras vidas. Todavía les queda mucho recorrido por delante, ya que su utilidad está más que demostrada.